Las soluciones no son ni mejores ni peores son solo diferentes. No obstante, cuando nos centramos en una variable o, mejor dicho, en la variable, las diversas soluciones se pueden medir dando lugar a la apariencia de que una solución es mejor que otra, pero debemos aceptar que es un criterio sesgado. Si tenemos en cuenta otras variables, veremos como al hacer crecer unas, otras decrecen.
La indecisión que lleva cuando nos fijamos en más de una variable ha sido resuelta mediante una ordenación jerárquico-lineal de estas bajo una supuesta objetividad. Así es como creo que el imperio se interesó por la ciencia, ya que ella quiso independizarse de la apariencia mediante la objetividad. Sin embargo, en la actualidad la ciencia está cambiando y el imperio, no.
Está surgiendo una corriente en favor de la diversidad de pensamiento o en favor de la bio-cultura diversa que es lo mismo, pero expresado de otro modo. Esta corriente se abre camino en las fisuras del “asfalto” de la objetividad supuestamente imparcial y que todo ser humano debe auto-priorizar frente a la subjetividad que su perspectiva le ofrece.
El cuento del elefante y los ciegos en donde unos científicos ciegos describen a un elefante basándose en su percepción parcial del todo es un claro ejemplo de lo que ocurre. No hay objetividad sin subjetividad. No hay una percepción que invalide las demás. Hay muchas percepciones que integrar para llegar a tener una visión holística de la realidad.
De ese modo si una mujer coge el cesto y se lo pone en la cabeza, no es una solución peor al invento de la rueda. Eso sí, la rueda ha hecho crecer una variable admirada por unos pocos: la variable. Una visión holística, una visión abierta a otras sensibilidades y criterios nos permitirá ver la «esclavitud» que se desarrolla en la sociedad de la automatización.
Con ello no digo que sea mejor ponerse el cesto en la cabeza que usar una carretilla, solo digo que son diferentes. Mientras una solución hace crecer unas variables, la otra solución hace crecer otras dimensiones distintas a las anteriores. Son solo dos formas de sobrevivir o superar una dificultad. Las dos son válidas y dignas de coexistir. Además, presiento muchas veces que, si eliminamos una solución, la otra o las demás dejan de ser solución.
Referencias
Los ciegos y el elefante. (2024, 9 de enero). Wikipedia, La enciclopedia libre. Fecha de consulta: 15:35, enero 9, 2024 desde https://es.wikipedia.org/w/index.php?title=Los_ciegos_y_el_elefante&oldid=156876335.