La afirmación que da título a este artículo es una sentencia fuerte. Hasta el punto que puede escandalizar y enfurecer a muchos, pero otros se alegrarán. Durante numerosos años –por no decir hasta hoy, lea a [Caivano_1995*] aquí– se ha supuesto lo contrario. Por tanto, si estoy en lo cierto, debemos de rectificar cuanto antes.
Un espacio, en geometría, es un conjunto de «localizaciones» por donde nos movemos. Por ejemplo, puedo encontrarme en Barcelona e irme a Madrid. Dichas «localizaciones» las llamamos puntos y son fijas/os. Los puntos son diferentes entre sí y, por tanto, dan pie a una distancia y a un conjunto de movimientos.
La distancia entre dos puntos cualesquiera es siempre la misma. Por ello decía que son fijos. Entonces en un espacio, no cabe la posibilidad de que los puntos se sumen, se mezclen, se multipliquen… No es cierto que Barcelona + Madrid = ¿Bilbao? Las localizaciones no interactúan entre sí, sólo están separadas.
Los colores, en cambio, se pueden mezclar para dar lugar a otro color*. Por tanto, no forman un espacio geométrico de algún tipo. Dicho lo anterior, recomiendo no aplicar primero la geometría al mundo del color. Esta argumentación tan sencilla y corta contradice lo hecho desde tiempos ancestrales.
Pero, entonces, ¿las matemáticas pueden aportar su ayuda a los colores? Sí. En matemáticas hay una especialidad que estudia las interacciones internas de un conjunto dado. Estas interacciones dan lugar a una ley que define el resultado en todos los casos. Matemáticamente se llama Ley de Composición Interna*.
La especialidad que estudia los conjuntos y su L.C.I. se llama Álgebra. Por tanto, los sistemas de ordenamiento de los colores*, los cuales, desde la antigüedad, intentan ubicar a los colores de forma geométrica, no es un buen comienzo. Además, la geometría no es la única rama de las matemáticas donde se cuantifica.
El primer paso es, entonces, encontrar unos números en los que identificar a los colores basándonos en su comportamiento y no en su supuesta distancia.
Las matemáticas pueden aportar cosas interesantes y útiles en un montón de campos y áreas de conocimiento. Son pura creatividad e imaginación. ¡Gracias por el post!
Esa es la intención de las matemáticas.