Si tu vida es triste puedes utilizar el negro para expresar tu dolor. Tienes derecho a llorar y debes usarlo. Pero, cuidado, que no te pillen muchas veces porque hoy está tipificado como una enfermedad con su nombre técnico.
Fíjate que está mal visto no sonreír, está mal visto el luto, está peor visto no salir de fiesta. Sin embargo, la sociedad cada vez más necesita mayor ingesta y consumo de “alegrizantes” para llegar a ese estatus social de aceptación.
En el imperio del éxito quién dice que sufre. La única respuesta que evita un rechazo a la pregunta ¿cómo estás? es la de decir: ¡Bien!
Nadie dice ir al médico, pero las listas de espera son cada vez más largas. Nadie reconoce públicamente tener algo crónico, pero las farmacias están llenas. La autocensura ha llegado a magnitudes alucinantes.
Por ello te pregunto:
¿Cuándo lloraste por última vez? No de emoción, sino de pena y dolor.
Las lágrimas deben caer
en la tristeza como las
hojas en otoño.
Agradecimientos
- Imagen destacada de Gordon Johnson de Pixabay.
